sábado, 5 de febrero de 2011

visita


Dentro de ese mundo tuvieron una destacada presencia los
yangüeses, reputados arrieros que durante décadas monopolizaron el
tráfico de mercancías en la Meseta española6. Don Miguel de Cervantes se
hacía eco de su fama y los retrataba como gente levantisca. Con un grupo
de ellos tuvo un desafortunado encuentro Don Quijote, del que salió
apaleado junto con su fiel escudero7. Mantuvieron viva la red de
distribución que desde Sevilla conducía las mercancías a la cornisa
cantábrica, cruzando el país de sur a norte, y a su paso por Castilla por la
cañada soriana, a tramos conocida como el camino de los yangüeses. Parece
que en el desarrollo de sus actividades los yangüeses elevaron el rango de
su participación dentro de la estructura económica más allá del de simples
arrieros y carreteros. Pues ante la necesidad de asegurar las entregas y dar
confianza al cliente, cierran acuerdos contractuales en los que se fija el
sistema de garantías.
http://www.upo.es/depa/webdhuma/areas/arte/actas/3cibi/documentos/011f.pdf